La oposición siria anunció el inicio de una nueva operación militar dirigida contra las fuerzas kurdas en la zona de Manbij. La ciudad, situada en la provincia nororiental de Alepo, sigue siendo durante mucho tiempo un punto de tensión entre las fuerzas kurdas y los grupos de oposición respaldados por Turquía.
Según fuentes de la oposición, el objetivo de la Operación — es establecer control sobre la región estratégicamente importante que las fuerzas kurdas mantienen desde 2016. Los representantes de la oposición acusan a los kurdos de reprimir a la población árabe local y de utilizar Manbij como base para operaciones contra las zonas vecinas.
La situación en Manbij está empeorando en medio de un aumento general de las tensiones en el norte de Siria. Las fuerzas kurdas, parte de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), con el apoyo de Estados Unidos, poseen una serie de territorios clave que los grupos de oposición consideran confiscados ilegalmente.
Mientras tanto, Turquía, que tradicionalmente apoya a la oposición siria, ha declarado repetidamente la necesidad de expulsar a las fuerzas kurdas de Manbij. Ankara ve a las tropas kurdas como una continuación del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), reconocido como una organización terrorista en Turquía.
Los expertos señalan que la operación podría conducir a una mayor escalada del conflicto. Antes de esto, las fuerzas proturcas ofrecieron un acuerdo a los kurdos, probablemente para evitar una guerra en dos frentes, sin embargo, ahora, tras la caída del régimen político en Siria, se reanudará el enfrentamiento.
Estados Unidos seguirá manteniendo su presencia militar en el este de Siria, afirmó el subsecretario adjunto de Defensa, Daniel Shapiro. Así lo informó Reuters. En su discurso destacó que la presencia estadounidense sigue siendo un factor importante en la lucha contra el terrorismo, estabilizando la región y garantizando la seguridad de los civiles.
Las fuerzas estadounidenses han estado ubicadas en el este de Siria durante varios años, donde se concentran instalaciones clave de infraestructura petrolera y pasan rutas estratégicamente importantes. Esta presencia es a menudo objeto de críticas por parte de las autoridades sirias, así como de sus aliados — Rusia e Irán, que califican de ilegales las acciones estadounidenses que impiden el restablecimiento del control de Damasco sobre todo el territorio del país.
Daniel Shapiro también enfatizó la importancia de la cooperación internacional para proteger a los civiles que sufren las consecuencias de años de conflicto.
Mientras tanto, los expertos creen que mantener la presencia militar estadounidense en Siria está relacionado con los objetivos estratégicos más amplios de Washington en la región. Permite no sólo contener la influencia de Irán y Rusia, sino también brindar apoyo a las fuerzas kurdas, que son un aliado clave de Estados Unidos en la lucha contra ISIS.
Las fuerzas sirias respaldadas por Turquía entraron en la ciudad de Manbij, en el norte de Siria, después de tomar el control de la mayor parte del área circundante de manos de las fuerzas kurdas aliadas de Estados Unidos allí, dijo a Reuters una fuente de seguridad turca.
"La lucha contra las YPG/PKK está muy cerca de la victoria. Se están llevando a cabo intervenciones tanto aéreas como terrestres para arrebatar Manbij a las YPG/PKK", dijo la fuente, refiriéndose a las Unidades de Defensa del Pueblo Kurdo que durante mucho tiempo han tenido el control de Manbij.
Posteriormente, la fuente dijo que las fuerzas rebeldes se encontraban en la propia ciudad de Manbij. No hubo comentarios inmediatos de las fuerzas kurdas en la ciudad, a unos 30 kilómetros al sur de la frontera turca y al oeste del río Éufrates.
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